Durante muchos años, vendí productos de pesca, libros y otros artículos por Mercado Libre. Jamás iba a suponer que terminaría escribiendo para algunas empresas que, especialmente luego de la pandemia, comenzaron a utilizarlo regularmente como instrumento de venta. Como todos los nuevos medios, Mercado Libre tiene sus estrategias. No es lo mismo cualquier foto, pero tampoco es lo mismo cualquier texto.
En 2019 tomé un lindo curso al respecto, donde nos enseñaron acerca de cómo aprovechar al fondo la herramienta. La parte que más me interesó, obviamente, tiene que ver con el uso del lenguaje, sobre todo, emparentado con el público objetivo al que se dirige una venta en particular. Además de las famosas palabras SEO debí aprender sobre el lenguaje que se emplea, especialmente, en las franjas etarias a las que yo ya no pertenezco.
Todo esto se convirtió en un gran desafío que también utilizo para otras redes, como Instagram, Twitter, Facebook, Linkedin y TikTok, cada una con sus estrategias, donde la combinación, en mayor o menor medida, de imagen (foto o video) y texto da como resultado el cumplimiento de una meta propuesta. El material aprendido, en teoría y práctica, lo uso también para enseñar a empresas y particulares a desarrollar sus redes de comunicación. Pensar que, en 1989, por primera vez vi un aparato que me sorprendió: no podía creer que existiese eso. Se llamaba, y se llama, computadora personal y desde entonces jamás la abandoné en ninguna de sus variantes, incluso una que la combina con la comunicación oral, el celular.